Alguna vez, la
realidad virtual fue una herramienta solo accesible por avanzados centros de
investigación. Parte del entrenamiento provisto a los astronautas y a las
personas que sufren de ciertas fobias. Hoy se ha masificado, abriendo la
oportunidad de mejorar drásticamente nuestra manera de aprender. El reto de hoy
es generar el contenido adecuado.
La realidad virtual
abre la posibilidad de vivir experiencias con un alto nivel de inmersión,
siendo una excelente herramienta de aprendizaje. A través de imágenes y
sensaciones que quedan fácilmente grabadas en la mente de una persona,
estimulando uno de nuestros sentidos que nos produce más impacto: la vista.
Los sistemas de
realidad virtual actuales, consisten en una pantalla que se monta justo frente
a los ojos del usuario; mostrando una imagen levemente diferente a cada ojo
(estereoscópica), imitando las perspectivas que tiene el ojo cuando observa una
escena de manera natural. El usuario puede mover su cabeza y observar el
escenario virtual desde diferentes ángulos, lográndose un alto nivel de
inmersión.
Podemos encontrar
variadas alternativas, que van desde un visor de cartón que utiliza un celular
como pantalla y cuesta menos de dos dólares, hasta un visor que cuenta con su
propia pantalla y un sistema de posicionamiento espacial, para ser utilizado
con un computador. Hay variedad de calidades y precios.
Uno de los objetivos
de la prevención de riesgos es educar a las personas, con el fin de que tomen
mayores precauciones al momento de realizar su trabajo. Aquí es justamente
donde la realidad virtual tiene uno de sus puntos fuertes; elaborando un
paquete de contenidos adecuado, podríamos enseñar mediante la vivencia de una
serie de experiencias virtuales la importancia de las normas y elementos de
seguridad. No es lo mismo escuchar una charla que experimentar en primera
persona la vivencia de una situación. Por ejemplo, un tour virtual, acompañado
de una voz en off, que indique y explique los principales peligros y
precauciones presentes en una faena, ya puede generar un impacto superior y por
ende, influir en mayor grado en la consciencia de las personas. No hay
posibilidad de distraerse con el celular ni conversar con el colega mientras se
observa una experiencia de alto impacto visual y sonoro, tampoco se siente la
necesidad de hacerlo. Al ser mayor el estímulo y menores los distractores, será
más fácil recordar la información y posteriormente poner en práctica las
recomendaciones recibidas. La aplicación de este tipo de herramientas a la
capacitación del personal, tiene ventajas, que de ser correctamente explotadas,
se traducen en una capacitación eficiente.
Un método de bajo
costo para incorporar realidad virtual a la industria es la filmación en 360°
acompañada de una voz en off que guíe al usuario a través de la experiencia. En
este caso los costos se reducen porque no hay que generar contenido 3D ni
animaciones, en su lugar se utiliza un arreglo especial de filmación que
tiene varias cámaras. Para la comodidad del usuario, es ideal que estas tomas
sean en realizadas en puntos fijos, ya que el movimiento puede incomodar a
algunas personas. Al ser videos y no una aplicación especializada, la
experiencia no será interactiva, el usuario solo podrá ver, escuchar y girar
cabeza para observar distintas perspectivas. Sin embargo el contenido,
producirá un impacto superior a un video o charla tradicional, si es
correctamente creado.
Es recomendable que
usted conozca las diferentes alternativas ofrecidas por su proveedor, la
realidad virtual es algo que hay que “probar”, porque los diferentes tipos de
visores, ofrecen variedad de calidades y precios. Cuando usted participe de una
experiencia virtual, debe ver una imagen fluida, que no tenga “saltos” o sea
muy lenta cuando mueva su cabeza para visualizar, un bajo rendimiento de la
aplicación reduce enormemente la calidad de la experiencia virtual.
A lo largo del mundo
ya podemos encontrar variadas aplicaciones de realidad virtual en educación. En
septiembre del 2015, Google lanzó un programa gratuito de expediciones
virtuales para cientos de escuelas en diferentes países del mundo. Permitiendo
a los alumnos visitar desde el fondo del océano hasta Machu Picchu, en un tour
guiado por el profesor. La industria tampoco se queda atrás, un ejemplo de ello
es la empresa multinacional Cape, quien provee servicios críticos a las
industrias de energía y recursos naturales. Ya han entrenado a cientos de sus
trabajadores a través de videos 360° de sus instalaciones, grabaron una planta
de energía desde la perspectiva de un trabajador, creando una experiencia
especialmente ideada para su personal. Logrando transmitir los mensajes de una
manera más efectiva e innovadora y obteniendo un feedback sumamente positivo
por parte de los trabajadores.
La realidad virtual
no solo está siendo utilizada para inducción de personal, sino que también se
ha convertido en un poderoso recurso en el ámbito de la simulación. Logrando
reducir el peso y complejidad de los simuladores, sin perder su nivel de
inmersión. En Chile, la empresa Yoy Simuladores, además de generar contenido
especializado para capacitación con realidad virtual, fabrica simuladores de
maquinaria pesada. A diferencia de los simuladores tradicionales, que pesan más
de 200 kg y requieren de varias personas para su transporte e instalación,
estos simuladores vienen en una maleta transportable por una sola persona, con
un peso inferior a los 12 kg.
A través de estos
simuladores, se han entrenado cientos de trabajadores, en diferentes regiones
del país. Usando los primeros visores de realidad virtual Oculus Rift que
llegaron a Sudamérica y fabricaron el primer simulador de puente grúa que
cuenta con realidad virtual y un sistema de reconstrucción 3D de manos y
controles en tiempo real, esta innovación fue única a nivel mundial y dado a
conocer en Expomin 2014 junto a Alo Group. El último lanzamiento fue un
simulador de camión minero ambientado en Chuquicamata, el cual permite al
operador no solo realizar maniobras de carga y descarga, sino también compartir
la ruta con otros camiones que circulan por la mina. Actualmente se está
trabajando en un sistema de realidad mixta, que permite mezclar objetos reales
con objetos virtuales, con el fin de alcanzar el máximo nivel de realismo
posible con la tecnología disponible.